¿Cómo Protegerte Legalmente Tras Una Mordedura De Perro?

Los ataques de perros son incidentes imprevistos que pueden acarrear importantes repercusiones físicas, emocionales y legales para las personas que los experimentan. En los estados de California y Nevada, así como en varios otros territorios, se ha establecido un marco legal con la finalidad de resguardar a las víctimas de estos incidentes y asegurar que sus derechos sean respaldados durante todo el proceso. El propósito de este artículo es ofrecer una orientación informativa acerca de cómo asegurar la protección legal luego de ser víctima de una mordedura de perro. Abogados con Experiencia está a una llamada de resolver su problema legal y absolver sus dudas.

¿CÓMO PROTEGERTE LEGALMENTE TRAS UNA MORDEDURA DE PERRO EN CALIFORNIA?

Si has sufrido una mordedura de perro en California o Nevada y estás buscando protegerte legalmente, es importante que sigas ciertos pasos para asegurarte de que tus derechos estén protegidos. Más adelante le indicaremos algunas pautas generales que puedes seguir, pero ten en cuenta que siempre es recomendable consultar a un abogado de lesiones personales para obtener asesoramiento específico sobre tu caso.

RESPONSABILIDAD DEL DUEÑO UNA MORDEDURA

Existen leyes que establecen la responsabilidad del dueño del perro en caso de mordeduras u otros ataques por parte de su mascota. La ley de responsabilidad del dueño del perro en California se rige por el “Estatuto de mordedura de perro” (Código Civil de California, Sección 3342). Aquí se establecen las principales disposiciones:

• Responsabilidad estricta: En California, el propietario de un perro generalmente es responsable de las lesiones causadas por su perro, independientemente de si el perro tenía un historial previo de agresión o si el propietario conocía o no el comportamiento agresivo del perro.

• Daño a terceros: El estatuto de mordedura de perro se aplica no solo a las personas que son mordidas por el perro, sino también a aquellas que resulten lesionadas de otras maneras debido a las acciones del perro. Por ejemplo, si un perro causa que alguien se caiga y se lesione, el propietario del perro puede ser considerado responsable.

• Lugar público o privado: La responsabilidad del dueño del perro se aplica tanto en lugares públicos como en propiedades privadas, incluyendo la propiedad del propio dueño del perro.

• Excepciones limitadas: Las excepciones a esta responsabilidad estricta pueden incluir situaciones en las que la víctima provocó intencionalmente al perro o estaba cometiendo una actividad ilegal en la propiedad del dueño del perro en el momento del incidente.

• Defensa del propietario: El propietario del perro puede argumentar defensas, como la entrada ilegal en su propiedad o el hecho de que la víctima provocó al perro de manera intencional y causó el ataque.

• Compensación para la víctima: La víctima de una mordedura de perro tiene derecho a buscar una compensación por daños y perjuicios, que puede incluir gastos médicos, pérdida de ingresos, dolor y sufrimiento, y otros daños relacionados con el incidente.

PASOS LEGALES PARA RECLAMAR

Si has sido víctima de una mordedura de perro y deseas presentar una reclamación legal para buscar compensación por tus lesiones y pérdidas en California, aquí tienes los pasos legales que puedes seguir:

• Busca atención médica: Lo primero y más importante es buscar atención médica inmediata para tratar tus heridas. Esto no solo es crucial para tu salud, sino que también documentará tus lesiones.

• Identifica al propietario del perro: Intenta obtener la información del dueño del perro, incluyendo su nombre, dirección y número de teléfono. También anota cualquier información sobre el perro, como su nombre, raza y si ha recibido vacunas recientemente.

• Reporta el incidente: Denuncia el incidente a las autoridades locales, como la policía o el control de animales. Esto creará un registro oficial del incidente.

• Reúne evidencia: Documenta tus lesiones tomando fotografías de las heridas y el lugar del incidente. Además, recopila cualquier evidencia relacionada, como registros médicos, facturas de tratamientos médicos y cualquier correspondencia con el propietario del perro.

• Consigue testigos: Si hubo testigos del incidente, obtén sus nombres y números de contacto. Sus declaraciones pueden respaldar tu reclamación.

• Busca asesoramiento legal: Consulta a un abogado especializado en lesiones personales en California. Un abogado experto te ayudará a evaluar la fortaleza de tu caso y te guiará a través del proceso legal.

• Notificación al propietario del perro: A través de tu abogado, notifica al propietario del perro sobre tu intención de presentar una reclamación. Esta notificación puede ser un paso inicial para buscar una resolución sin tener que recurrir a la corte.

• Negociaciones de reclamación: Tu abogado puede entablar negociaciones con el propietario del perro o su compañía de seguros para buscar una compensación justa. Esto puede incluir gastos médicos, pérdida de ingresos, dolor y sufrimiento, entre otros daños.

• Demanda civil: Si no se llega a un acuerdo durante las negociaciones, tu abogado puede presentar una demanda civil en tu nombre contra el propietario del perro. Esto inicia el proceso legal formal.

• Preparación para el juicio: En caso de que la demanda no se resuelva antes del juicio, tu abogado se encargará de preparar tu caso para la corte, presentar pruebas y representarte durante el juicio.

• Veredicto y compensación: Si el juicio llega a su término, un jurado decidirá si el propietario del perro es responsable y, en caso afirmativo, cuánta compensación debes recibir por tus lesiones y pérdidas.

MITOS SOBRE LAS MORDEDURAS DE PERRO

Existen varios mitos comunes en torno a las mordeduras de perro que es importante aclarar para tener una comprensión más precisa de este tema. Aquí tienes algunos de los mitos más comunes sobre las mordeduras de perro:

• Los perros de ciertas razas son inherentemente peligrosos: Uno de los mitos más persistentes es que ciertas razas de perros son inherentemente más peligrosas que otras. Esto no es cierto. La agresión de un perro depende más de factores individuales, como su crianza, entrenamiento, ambiente y salud, que de su raza.

• Los perros siempre muestran señales de agresión antes de morder: Si bien es cierto que muchos perros pueden mostrar señales de incomodidad o agresión antes de morder, no todos los perros lo hacen. Algunos perros pueden morder sin previo aviso, especialmente si se sienten amenazados o asustados.

• Si un perro no rompe la piel, no es una mordedura grave: Incluso si un perro no rompe la piel en una mordedura, puede causar lesiones graves debajo de la superficie. Las lesiones internas, hematomas y contusiones pueden ser igual de graves que las heridas externas.

• Los niños son más propensos a ser mordidos por perros agresivos: En realidad, los niños son más propensos a ser mordidos por perros familiares o conocidos, no por perros extraños. Esto puede deberse a la falta de familiaridad entre el niño y el perro, así como a la incapacidad del niño para interpretar las señales de un perro.

• Si una persona invade el espacio de un perro y es mordida, es culpa de la persona: Aunque es importante que las personas respeten el espacio de un perro desconocido, la responsabilidad última recae en el propietario del perro por controlar y socializar adecuadamente a su mascota. Los perros deben estar bajo control en lugares públicos.

• Todos los perros son amigables y no morderán a menos que sean provocados: Aunque la mayoría de los perros son amigables, no se puede asumir que todos lo son. Los perros pueden morder por diversas razones, incluyendo el miedo, el dolor o la protección de su territorio.

• Una vez que un perro muerde, siempre será agresivo: No es cierto que un solo incidente de mordedura convierta a un perro en permanentemente agresivo. El comportamiento del perro puede ser modificado a través de entrenamiento y socialización adecuados.

• No es necesario buscar atención médica después de una mordedura leve: Cualquier mordedura de perro, incluso las aparentemente leves, debe ser evaluada por un profesional médico. Las infecciones pueden desarrollarse y las lesiones subyacentes pueden ser más graves de lo que parecen.